Por Eduardo Visco*
Al cumplirse un nuevo
aniversario de la
Democracia , experimente la sensación como ser humano de haber
alcanzado la utópica meta de “La
Felicidad ”.
La plaza con su
profunda y simbólica historia así lo dejaba trascender, se entrecruzaban
cientos de recuerdos, la patria fusilada por quienes prometieron “Ni
vencedores, ni vencidos”, Científicos en el éxodo, para luego el doloroso exilio,
eso fue la “Noche de los Bastones”, luego sangre inocente regando las rutas de
mi patria tomada por quienes nos proponían
“La reconstrucción Nacional” y junto a ellos sus “camaleones”
aliados.
Allí en la plaza lo vi.
a Rodolfo Walsh, al “Curita” Carlos Múgica, tan fuerte era la presencia que
para vivir en plenitud esa felicidad recordé el nacimiento de mis hijos,
sublime momento, jamás superado.
La fiesta había
comenzado, ya nada la detendría, los abrazos y la alegría se repetían a cada
instante, éramos muchos, no se cuanto ni me importa…éramos muchos…
Y fue Charly y fue Fito,
el delirio se multiplicaba la felicidad y la alegría trascendía al interior de
nuestra patria federalizando la argentina olvidada durante décadas.
El cielo se vistió de
coreografía danzante, acompañando la fanfarrea militar, yo desde adentro le agradecía
a la vida por darme la oportunidad de haber vivido ese instante, instante que será
instante de eternidad.
Y fue Cristina que
nos hizo sentir que somos parte de una de las más importantes transformaciones
de nuestra dolida y saqueada Argentina, y Néstor apareció sobre el escenario,
con su convicción, con su simpleza y su mirada de estadista.
Y mientras esto sucedía
en nuestra América latina, hoy liberada, el compañero Hugo Chávez pasaba por
momentos muy difíciles en lo personal y para la Republica Bolivariana
de Venezuela íntimamente ligada desde la acción y el sentimiento a los destinos
de nuestra región, Cristina así lo sintió y el grito de argentina se oyó desde
la quiaca hasta Caracas, supero la cordillera para instalarse por un rato en La Paz y seguir cual eco profundo
hasta Ecuador, Perú, Chile y Uruguay.
El Pueblo (lo escribo
con mayúscula , por que así corresponde) plesbicitó un modelo, el del amor y la
alegría, la construcción por encima de los odios, un modelo Nacional y Popular,
resistido por las corporaciones y su aliado Grupo Clarín que suma el ancestral
odio de la Familia Mitre
por las clases populares, actúan desde las sombras , declaman “Libertad de
Expresión” y en los hechos la restringen, desinformando, ocultando o
magnificando situaciones naturales en las relaciones de una sociedad plural y
cosmopolita.
Y mientras las
sombras ocultaban ,incapacidades, falta de imaginación, ideas
desestabilizadoras, apetencias de poder , sostenimiento de privilegios que
desde la legalidad van perdiendo uno a uno, “La Plaza ” era atravesada por la
fuerza interactiva entre la
Presidenta y el Pueblo que con su masiva presencia
convalidaba su liderazgo, los niños iban y venían, los cánticos se sucedían
como cascada de esperanza y amor, el cielo se ilumino en millones de flores en
ramillete iluminando un antiguo y oscuro sendero convertido hoy en la gran
autopista de la esperanza y la dignidad recuperada.
En la plaza estábamos
todos junto a La
Justicia Social , La Victoria
Final , el Pueblo y la Patria finalmente sentida, juntos como presintiendo lo que sucedería en Tucuman, lo inadmisible lo aberrante y muy doloroso fallo de tres jueces que seguramente serán juzgados por su propia consciencia (si es que la tienen). Solidaridad plena con Susana Trimarco.
Gracias Pueblo,
Gracias Néstor, Gracias Cristina, Gracias a la Resistencia , Gracias a
las Madres, a las Abuelas, a los caídos, a los desaparecidos, a mis compañeros
de militancia, Gracias por está Democracia Construida entre los cuarenta
millones de Argentinos.
*Periodista y
Escritor-Sec. Prensa y Difusión “Doctrina en Marcha” PJ
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